El Sábado, estábamos todos bastante cansados, por la paliza del día anterior. Con la incorporación de nuevos componentes, el grupo aumentó. También llegaron Bea y Toni, amigos de Carlos.
El Gorgonchón, es un barranco ubicado en la cuenca del Formiga, caracterizado en algún libro, como uno de los 50 barrancos más bonitos existentes en el Pirineo. Con eso se dice prácticamente todo.
Su caracter estrecho le concede un alto nivel técnico, con caudal elevado. Es por ese motivo, por el que deberemos evaluar bien antes de entrar, pues son 4 las personas muertas y un gran número de incidentes, debidos siempre a no utilizar el pasamanos para descender su final. Por lo tanto omitirlo, sería una gran imprudencia.
Dicho lo cual, Accederemos a el tras pasar la población de Yaso, 350 metros despues en dirección a Bastarás, nos encontraremos una pista a mano izquierda que nos conduce a una bonita explanada donde podremos dejar el vehículo.
Es recomendable hacer este descenso, sin petate, llevando lo justo, pues hay puntos realmente estrechos, donde pasar puede resultar incomodo. Acceso: 15´descenso: 45´a 1h retorno: 30´
Una vez con el material equipados, descendemos el camino de aproximación que en 15 minutos nos lleva al cauce del Formiga, unos metros más adelante empieza nuestro Barranco.
A tener en cuenta que ninguno de los dos rapeles, debe rapelarse por la cascada. Debido a la estrechez del barranco, debe hacerse oposición alejandonos de la misma, y descender usando esta técnica.
Lo mejor aún estaba por llegar, tras este punto, el barranco reaparece ante nosotros, un pequeño resalte delicado y una galería sombría, donde nos espera un sifón. Más tarde unas preciosas cascadas de toba, y el barranco acaba por abrirse dando paso a la luz, y a una represa, para realizar la última y final foto de grupo.
Hasta la próxima....
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