martes, 1 de septiembre de 2015

Programación adecuada, ser objetivos.

Ultimámente, en este deporte, solo prima la acción. "Cuanto más mejor", esto nos conduce, irremediablemente a actitudes, que en determinadas ocasiones, y en determinados contextos, convierten nuestra actividad en peligrosa.
Últimas noticias, así lo confirman. Hay que conocer, las herramientas de las que disponemos, documentarnos adecuadamente, conocer el nivel del grupo o de los barranquistas, que van a hacer la actividad, y planificar adecuadamente.

Es importante, saber usar el SAIH, que no el SAY, ni el SAI, ni el SHAI, como he visto por ahí. El SHAI, bien podría ser el SHA de Persia, me suena a algo más así, que el SAIH para determinar el caudal de algunas de las cuencas hidrográficas que pertenecen a la cuenca hidrográfica del Ebro y sus principales afluentes. Ríos en los cuales desarrollamos nuestra actividad.

Igualmente es necesario comprender, cuales tienen presa, y cuales no. Hecho representativo, que indicará que caudalímetros, pueden servirnos como referencia y cuales, no.

Al margen de todo esto, la previsión meteorológica, evidentemente, es de vital importancia. Conocer, que previsión de tiempo tenemos, de que ventanas de tiempo disponemos para acometer un descenso, y sin duda, tener presente, si el río tiene un caudal apto para nosotros y para el grupo.
Evaluar un río, es casi diría trascendental. Y, no sólo, se debe evaluar, para el que evalúa. Craso error, se podría decir que cometemos, si así lo hacemos. Si no que, se debe evaluar, para el grupo, teniendo presente las condiciones técnicas de cada miembro, y si son aptos o no, para la situación más desfavorable que se pueda producir.

(Garganta de las Gloces, uno de los barrancos más bonitos de Pirineos. Con una gran cuenca hidrográfica, por su estrechez, con riesgo de tormenta, no se recomienda su descenso.)
Otras de las cosas, que se deben tener en cuenta, es, como es la cuenca hidrográfica del descenso, si es minúscula, o si es de grandes dimensiones. Si recoje agua, o si su minúscula cuenca, no nos causará grandes problemas, aunque caiga un gran diluvio. Si su roca, filtra o canaliza, también es importante, no es lo mismo, una roca de conglomerado que un sistema karstico.
Principios, como estos, son los que deben marcar una programación. Por lo tanto, si la pregunta es, podemos hacer barrancos, en un fin de semana, con previsión de grandes tormentas?. La respuesta, es evidente, SI.
Pero, hemos de valorar, todas estas variables. No te puedes meter en un fin de semana de tormentas, en un barranco de aguas vivas, como por ejemplo Navarros, o meterte en un barranco estrecho con una gran cuenca, como por ejemplo Gloces, o meterte en un barranco que en veinte mínutos y con tormenta, puede pasar de convertirse en un descenso ocioso, a un descenso infernal, como lapazosa.
(Problemas en últimas pozas, en gran crecida en barranco Lapazosa. El descenso pasó de ser un descenso liviano, a convertirse en lo que veis en la foto. Con graves problemas para el grupo que obvió la respuesta a las lluvias, en este barranco. La situación cambió en escasos 20 minutos de fuertes lluvias.)
La meteorología, no es una broma. Pero la geomorfología de un descenso, ligada a una meteorología no tenida en cuenta, se pueden convertir, en un accidente muy grave. Seamos pues cautos.

A modo de ejemplo, y sin querer extenderme en exceso. Quiero explicar, una programación de un fin de semana, en el que no dejó de llover, y lo hizo muy fuerte. Cayeron muchos litros por m2 en pirineos, y allí estuve con novatos, haciendo barrancos.
Para hacerlo posible, lo primero que haces, es:

- Ver donde ha llovido, y ha cargado, o llenado.
- Ver las zonas que te permiten una ventana de tiempo.
- Evaluar correctamente, los caudales.
- Estudiar la previsión de lluvias en mm, y en zonas determinadas, casi a tiempo real, para elegir la mejor zona.
- Comprobar accesos y entradas (cruces de ríos, etc)
- Comprobar los niveles de los SAIH´s si fuese necesario por la zona, y saber comprender los datos en m3. Tener referencias de situaciones con caudales favorables para descender los barrancos de la zona, según los datos presentados por los aforos.
- Elegir barrancos, que por zona, escapes, y posibles aumentos de caudal no previstos, no den problemas, que no puedan ser solucionados.
- Comprobar cuencas hidrográficas.
- Huir de las zonas de tormenta.

Al margen, de que todavía, hay un montón de variables, que se deben preveer y tener en cuenta, a grandes rasgos. Estas pequeñas licencias, bien estudiadas, te permitirán realizar actividad, aunque el tiempo, quiera impedirtelo.
Descensos realizados:
Abizanda

(Abizanda, un descenso sencillo, escogido después de lluvias.  Lo cogemos con un caudal aceptable)
Furco

(Furco, uno de los grandes clásicos. Acepta bastante agua, tiene escapes, y bien conocido, es un barranco que no entraña grandes complicaciones.)
Os Lucas ó Espierre

(Día conflictivo, de muchas lluvias. Tras desestimar Betato, por estar en carga, nos dirigimos a Espierre, también llamado Os Lucars. El descenso empieza con agua cristalina, y tras llover fuertemente, el barranco entra en carga, en las dos pozas finales.  Comprobación, "In situ", del funcionamiento de respuesta tras lluvias en un descenso de estas características.)

Basender

(Un barranco escuela, perfecto para practicar. Lo escogemos, tras las fuertes lluvias y previsión de las mismas en determinadas zonas de Pirineos. Estudiamos la meteo, y cambiamos de zona)
Palomeras del Fornocal
(Palomeras del Fornocal, un descenso estético, con un marcado caracter estrecho. Tras las fuertes lluvias, presentaba un buen aspecto.) Clásicos de la Sierra de Guara.

Penilla
(Un gran y aislado desconocido. A pesar de ser una buena elección, fuera de las zonas de fuertes lluvias, pensábamos que llevaría más caudal, por haber estar asediado en los días previos por fuertes tormentas. No fue así, "forma parte del juego". Ejemplo práctico, de la poca agua que recoge un barranco con una cuenca hidrográfica minúscula, y lo rápidamente que desagua.)
Como se puede ver, los barrancos escogidos, son de bajo nivel. Aunque, bien es cierto, que no hay descenso de nivel bajo, sino condiciones de nivel asequible, esto, es muy importante tenerlo en cuenta. Es una programación sencilla, que nos permitió realizar actividad, a pesar, de las "malas" condiciones meteorologicas y ambientales.

Así que,  sencillamente, a la hora de programar, se cauto, se inteligente y ten en consideración las variables para acometer la actividad de forma segura. Disfruta.

Hasta la próxima ;-)

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